Proyecto artístico de los alumnos de 1º de Bachillerato de La Salle Gran Vía con CAAV y Heraldo de Aragón

               El centro educativo La Salle Gran Vía ha puesto en marcha una serie de exposiciones especializadas en distintas materias artísticas con la que pretende ayudar a potenciar la actividad cultural en la ciudad de Zaragoza. Esta iniciativa se suma a otras, ya en activo, como el Club de Lectura y el Cineclub, con las que el colegio busca dinamizar la oferta cultural del centro educativo y acercarla a sus alumnos.

            Con una periodicidad bimensual, se aspira a constituir un nuevo ámbito de difusión para la obra de artistas noveles que, generalmente, suelen tener dificultades a la hora de exponer su obra. Se constituye así un espacio abierto para el conocimiento de trabajos relacionados con la pintura, escultura, dibujo, grabado y fotografía, a la vez que se crea un marco de intercambio de ideas y propuestas teóricas de reflexión estética.

            Además, el trabajo creativo también pretendemos desarrollarlo dentro del propio centro involucrando a un grupo de profesores y alumnos como dinamizadores de estas y otras propuestas en lo que hemos acordado llamar Espacio Crea. Por ello, al recibir la propuesta del Proyecto Educativo desde CAAV y Heraldo de Aragón, enseguida entendimos que podría tener cabida dentro de este espacio. Ya que como los propios alumnos del centro dicen:

          “Espacio Crea es una propuesta que nos llega por parte de la dirección del centro a los alumnos de ESO y Bachillerato para que, en colaboración con un grupo de profesores, desarrollemos un proyecto que pueda aunar la actividad cultural de La Salle Gran Vía (Sala de Exposiciones, Club de Lectura, Cine-Club) con el periódico de la AMPA, la radio escolar, el periódico virtual, el equipo de animación de proyectos, el grupo de ambientación musical y decorativa, etc. Así, creemos que se nos ofrece a los alumnos la posibilidad de tener voz y voto en todo aquello que, de hecho, nos concierne. Estas actividades nos descubrirán todo un mundo de posibilidades, y nos ayudarán a ver un poco de nosotros mismos en el día a día del colegio, a la vez que se mejora la calidad del centro al incluir el punto de vista de los principales interesados: los alumnos. Ahora mismo, El proyecto que llevamos a cabo con Sandra Montero e Ignacio Fortún, está teniendo una repercusión importante en cuanto al interés despertado en aquellos alumnos que estamos participando. Hemos escuchado sus propuestas artísticas, contemplado su obra y reflexionado con ellos el concepto de arte en el mundo contemporáneo. Por eso, en estos momentos, estamos inmersos en el desarrollo de nuestra propia obra y del diálogo que la misma puede establecer con la de los demás integrantes y la de los propios artistas.”

            En septiembre, al finalizar el proyecto, podremos mostrar el resultado durante ese mes en la sala de exposiciones del centro, lugar al que los demás alumnos del colegio podrán acceder para debatir sobre las diferentes concepciones artísticas reflejadas en la muestra.

        Aquí os dejo lo que ellos han plasmado a través de este texto y algunos elementos gráficos y audiovisuales que pueden servir para entender mejor su reflexión, puesta en marcha y realización. 

           Desde la Salle Gran Vía de Zaragoza, un grupo de alumnos nos hemos implicado en un proyecto.

         En estos tiempos en los que la cultura y la creatividad están tan infravalorados, todos tratamos de hacer nuestras propias pequeñas reivindicaciones, cada uno en la medida que podemos. Nosotros, alumnos de 1º de Bachiller, hemos elegido una representación este día 30 de mayo en la Plaza San Francisco.

            Inspirados por las visitas a nuestro colegio de Sandra Montero e Ignacio Fortún, hemos podido comprobar y observar dos maneras de arte totalmente diferentes y que hemos intentado encajar en nuestra expresión artística de la mejor manera.

         Sandra Montero es una joven artista reconocida que a lo largo de su obra decide trabajar con la interactuación de los espacios y de la persona, cómo se sitúa, la manera de verlos e interpretarlos, de sentirlos, y de relacionarse con ellos constantemente. Cuando vino al colegio quiso con su explicación acercarnos ese mundo, que a veces difícil de comprender, y proponernos la posibilidad de sumergirnos en él.

     En cambio, Ignacio Fortún, realiza otro tipo de arte, basado en su gran mayoría en serigrafías estampadas sobre planchas de zinc. En ellas, vuelca los paisajes desde la observación inmediata y su reflexión, consiguiendo que la materia, y sobre todo la luz reflejada se conviertan en los elementos expresivos. Con él, pudimos comprobar en primera persona cómo los diferentes tonos de luz y sus intensidades, se proyectaban de manera diferente cambiando la obra en cada momento, como si “estuviese viva”, e incluso pudimos realizar nuestra propia representación improvisada.

       A partir de la gran oportunidad a nivel creativo que nos propusieron, decidimos buscar alguna forma de hacerlo nuestro.

Reunimos un pequeño grupo de gente y tratamos de llegar a una posible idea conjunta, original y que pudiera aplicarse a la situación actual y a aquellas perspectivas que se nos habían presentado, concluyendo finalmente, tras varios días de indecisión, con el proyecto presentado a continuación.

          La idea que tuvimos, podría resumirse en que era una pequeña actuación en un espacio público que fuera a su vez recogida mediante tanto vídeo como material fotográfico. En ella, pretendíamos representar un proceso de creación de personas, todas iguales y monótonas, siendo producidas por unos iconos de la educación actual, hasta que se produce un cambio. Un cambio que en nuestro punto de vista es necesario, y rompe con todo lo anteriormente establecido. Esto es lo que pretendemos transmitir.

       Al principio fue difícil plasmar nuestras ideas y relacionarlo con lo que los artistas nos habían transmitido, pensábamos hacer trabajos individuales ya que el pensamiento de cada uno fue diferente. Pero conforme pasaba el tiempo e iban surgiendo más ideas, decidimos crear una sola idea común en la que nos pudiésemos implicar totalmente, con lo que agrandamos el grupo y el equipo de personas con la idea clara de representar un cambio. Por otra parte también se buscó implicar e interactuar con el exterior, y es lo que expresamos el jueves.

          Para concluir, tan solo podemos decir que a pesar de que ha sido complicado el hecho de coordinar a tal cantidad de gente y de formas de pensar para llegar a una única idea, es un trabajo gratificante el hecho de ver que algo tan importante como es la creatividad, la cultura o el querer romper con lo establecido siguen presentes en la sociedad actual y que, por mucho que se trate de cambiar este hecho, algunos jóvenes seguimos teniendo.

FOTOS REALIZADAS POR EL ALUMNO PABLO PASTOR

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